A raíz de uno de nuestro artículos, ya en 2015, en que os introducíamos por primera vez a las instalaciones de ventilación frente a la condensación, seguimos recibiendo numerosas consultas de afectados que no saben si las instalaciones de ventilación por sobrepresión que les están ofertando son realmente una buena solución a su problema de humedad. Vaya por delante que este será un artículo de OPINIÓN, con el único objetivo de transmitir las experiencias que hemos podido ir recopilando con el tiempo. Desde aquí no pretendemos sentar cátedra ni poner en duda el criterio de ninguna empresa del sector, de hecho, invitamos a cualquier usuario de estos sistemas a hacer uso de esta web para compartir también su experiencia y opinión con todos vosotros. Nadie mejor que un particular que se ha visto en vuestra misma situación para brindar información y opinión con conocimiento de causa.
En realidad los sistemas de sobrepresión de aire son los que, en su mayoría, se están instalando de una forma que no cumple la normativa de ventilación y, casi siempre, bajo nombres comerciales conformados por siglas: por ejemplo, las llamadas CTA (Central de Tratamiento de Aire), el STA (Sistema de Tratamiento de Aire), THC (Tratamiento de Humedad por Condensación), la VPH (Ventilación Positiva Higrorregulable), CEMI (Central ElectroMecánica de Insuflación), SVI (Sistema de Ventilación por Insuflación), etc.
¿Por qué decimos que no cumplen normativa?
La normativa vigente de ventilación en España a fecha de hoy la encontramos en el CTE (Código Técnico de la Edificación), en su Documento Básico de Salubridad, capítulo HS3 Calidad del Aire Interior. Viene a decir, en resumidas cuentas, que una correcta ventilación de la vivienda debe contemplar salidas de aire en estancias húmedas (cocinas, baños, lavaderos…) y entradas de aire en el resto de dependencias (habitaciones, salones, despachos…). La normativa nos fija unos caudales de aire para cada caso y, sobre esa base, podremos diseñar distintas instalaciones de ventilación.
Los sistemas de sobrepresión de aire, en el modo en que mayoritariamente se están instalando, no cumplen la normativa de ventilación porque no garantizan la entrada de aire en los caudales necesarios para cada una de las estancias de vida (habitaciones, salones, despachos…), pero mucho menos se garantiza la salida de aire en cada una de las estancias húmedas (cocinas, baños, lavaderos…) donde, en ocasiones, incluso se diseñan entradas de aire en vez de salidas. Las actuales instalaciones de sobrepresión conciben una única entrada de aire en la vivienda, en ocasiones desatendiendo si se trata de estancia de vida o estancia húmeda y, se diseñan con la intención de que ese aire pueda llegar en los caudales necesarios a todas las demás estancias de la vivienda. En el mejor de los casos, puede lograr la renovación del aire en todas las estancias, pero decimos en el mejor de los casos porque en la práctica, esto podría no llegar a producirse.
¿Pero por lo menos eliminan la humedad por condensación?
Visto que no cumplen normativa, veamos al menos si eliminan la condensación, que como usuarios es lo que más nos va a importar. En aquellas viviendas en que hay un problema de condensación por elevada humedad ambiental, la solución pasará por renovar ese aire para reducir la humedad. Si un sistema de ventilación por sobrepresión realmente logra la renovación del aire en las estancias en que se está produciendo la condensación, entonces sí será efectivo, de lo contrario no sólo no cumplirá normativa sino que tampoco evitará la condensación. ¿Y en qué casos logra renovar el aire este sistema? Veámoslo.
En aquellas viviendas en que el aire introducido desde un único punto, la máquina, logra abrirse paso a través de la vivienda barriendo todos los rincones de la casa y así “empujar” al aire preexistente, que es el que tiene un exceso de humedad, a salir por las rejillas que practican en las carpinterías del resto de estancias SÍ ESTARÁ REDUCIENDO LA HUMEDAD. Con suerte, lo suficiente como para evitar la condensación.
El principio físico de la sobrepresión es incuestionable, el problema surge a medida que el aire tiene dificultades para realizar el recorrido necesario. A medida que vayamos alejándonos del punto de entrada de aire, el caudal de aire nuevo se irá disipando por el camino, a cada nuevo quiebro en un pasillo, en recovecos detrás de armarios y mesillas, debajo de cada puerta que haya que sortear (por eso normalmente cepillan los bajos de las puertas)… cada nuevo obstáculo dificulta que el aire introducido desde ese único punto logre acceder a esquinas en las que realmente tenemos un problema. Por eso, en base a nuestra experiencia, el sistema de sobrepresión es efectivo en viviendas no demasiado grandes, con geometría más o menos cuadrada/rectangular, en que el recorrido del aire es relativamente sencillo y sabemos que el punto de entrada de aire va a estar cerca de los lugares en que tenemos el problema. Si una vivienda tiene la instalación de sobrepresión y el problema persiste, únicamente nos queda reprogramar la máquina al alza para que meta más aire confiando en que, ahora sí, logre barrer los espacios a los que no está llegando.
¿Y qué más debo tener en cuenta?
Al margen de lo anterior, están los factores secundarios a tener en cuenta a la hora de tomar una decisión. Los sistemas de sobrepresión, al menos todos los modelos a los que nosotros hemos tenido acceso, únicamente precalientan el aire mediante resistencias eléctricas. Esto significa que por cada grado de temperatura que queramos aumentar estaremos consumiendo electricidad, y aunque en verano tal vez ni siquiera hagamos uso de la función de precalentamiento, en meses de invierno cuando la temperatura exterior es baja el consumo eléctrico es muy elevado. Quien mejor puede opinar al respecto serán usuarios que tengan este sistema instalado y a quienes invitamos a compartir su experiencia en beneficio de futuros afectados.
Otro de los inconvenientes añadidos es el ruido asociado a la instalación. Cualquier maquinaria de esta tipología emite un nivel sonoro a tener en cuenta, cuánto mayor sea la vivienda más aire será necesario y más deprisa girará el ventilador, en consecuencia, más ruido. ¿Cuánto ruido? Pues lo suficiente como para que los instaladores eviten colocar la máquina en un dormitorio, porque no podríamos conciliar el sueño. ¿Mejor un salón, tal vez? Al igual que antes, siempre es mejor consultar a actuales usuarios o, mejor aún, solicitar que nos muestren alguna instalación ya hecha para valorar por nosotros mismos en qué medida el ruido puede ser un problema.
Otra de las quejas habituales suele ser el frío. Es lo que llamamos el efecto abanico. De nuevo, cuanto más grande es la vivienda, más aire necesitamos meter, así que el ventilador gira más y más deprisa. Aquí el problema es que, aunque hayamos precalentado el aire y su temperatura sí sea adecuada, el aire entra a gran velocidad en la estancia en la que está ubicada la máquina, y es precisamente la velocidad y no la temperatura la que genera una corriente que desemboca en la sensación de frío: lo mismo que hacemos con un abanico un día de verano en la playa, variar la velocidad del aire y no su temperatura para que la corriente nos genere sensación de frescor.
Alternativas
No quisiéramos extendernos más de la cuenta, pero debemos dejar constancia de que sí existen alternativas. Existen sistemas de ventilación que cumplen normativa, garantizan la ausencia de condensación, evitan todos los inconvenientes de los sistemas de sobrepresión y, además, poseen igualmente filtros de purificación de aire para retener la polución externa y minimizar las afecciones sobre los usuarios, sean o no alérgicos.
Dentro de estos sistemas de ventilación, que en vez de funcionar por el principio de sobrepresión funcionan por el principio de renovación, hay varias tipologías. Las más sencillas ni tan siquiera calientan el aire, pero las más avanzadas no sólo tienen las prestaciones señaladas sino que además calientan el aire con una especie de intercambiador de calor, ventaja fundamental que no existe en la sobrepresión.
El problema en general que presentan los sistemas de renovación es que no se trata de una instalación prefabricada a diferencia de la sobrepresión, la instalación exige unos cálculos y un diseño previos que dificultan mucho su venta y la hace poco rentable para los instaladores (en nuestra opinión, el auténtico motivo de que se vean poco).
El principal hándicap de estas instalaciones a la hora de proyectarlas en una vivienda ya existente es la obra. Para prestar servicio en todas las estancias es necesario que exista una red de conductos, normalmente ocultos tras falsos techos y/ó falsas vigas, que garanticen el flujo de aire correcto sabiendo que, de este modo sí, estaremos llegando a todos los rincones de la casa. Obviamente para alguien que no ha oído hablar de esto, la obra asusta, como decíamos es el principal inconveniente de la instalación, el resto son todo ventajas y garantías y, en el peor de los casos, se trata de “obras” que en una semana pueden quedar perfectamente terminadas. Ahora bien, MUCHO OJO con que quieran camuflarnos un sistema de sobrepresión por uno de renovación simplemente añadiendo tubos y falsos techos. En este caso no sólo estaremos optando por un sistema poco eficiente sino que la instalación conllevará un sobrecoste que tal vez no sea necesario.
Lo mejor, siempre buscar soluciones particularizadas
Resulta complicado brindar una opinión que resulte útil al público cubriendo tantas posibles generalidades como en el artículo de hoy hemos pretendido aclarar. Los problemas de condensación pueden ser muy diferentes entre sí. Existe demasiada información contradictoria en internet y, con este artículo, hemos querido plasmar nuestra opinión en respuestas a las muchas consultas que nos soléis hacer de una forma generalizada. Ahora bien, nuestro mejor consejo como siempre, es invertir en una valoración in situ de vuestro caso concreto. Existen muchas posibles actuaciones, cada una con sus ventajas e inconvenientes, y en nuestra opinión es importante conocer cuál de todas ellas es la posibilidad existente en el mercado que mejor se adapta a cada caso concreto.
Buenos días
Soy un afectado por una Central de Ventilación Integral (CVI).
Hace un año decidí colocar en mi casa una máquina para que me quitase los problemas de condensación, olor y moho. Estuve dudando entre una máquina de sobrepresión y otra de renovación. Me decanté por la de sobrepresión por la diferencia de precio frente a la de renovación y a parte, la obra necesaria, era mucho menor en la de sobrepresión.
Cada día que pasa, me arrepiento de esa decisión.
Después de un año con la CVI, no tengo problemas de condensación en paredes, ni aparecen los cristales mojados por las mañanas, pero nunca me eliminó los problemas de malos olores y moho que tanto prometían eliminar. A parte de quedarnos con una casa con olores y moho, se nos han sumado, además, el problema del ruido y el problema del polvo y la suciedad que entra en la casa. Por no hablar del interior de la máquina que es un nido de arañas, mosquitos y suciedad.
Desde el primer momento insistiamos en esos problemas y nos han mareado con soluciones extrabagantes y mentido con barbaridades en todas y cada una de las visitas. Y por supuesto, ni hablar de una devolución del aparato porque está en perfectas condiciones. Cosa que sería dificil lo contrario, ya que se trata de un ventilador y una resistencia, vamos, nada del otro mundo.
Nos sentimos, en parte, estafados por no eliminar todos los problemas que teníamos, y sentimos que se ríen de nosotros.
Cuando he leído que decís que este tipo de máquinas no cumplen la normativa del CTE, ¿podríamos de alguna manera alegar ese argumento para que se lleven la máquinay nos devuelvan el dinero? ¿Podemos hacer alguna cosa para la devolución del aparato? Nos han dicho que la única solución es ir a juicio y que no tenemos manera de ganar ya que la máquina funciona.
Muchas gracias de antemano.
Un cordial saludo
Buenas tardes D. Enrique,
Lamentamos profundamente su experiencia y, en la medida en que tengamos ocasión, trataremos de brindarle la información necesaria para alcanzar su doble objetivo: zanjar los problemas de humedades y hacer valer la garantía del aparato para su devolución.
Habida cuenta de que en estos casos conviene conocer en detalle cada particularidad del asunto, le contactaremos por privado para asesorarle con conocimiento de causa.
Atentamente,
El equipo de Hume Ingeniería.
Buenos días, yo tb tengo una casa con problemas de humedad en Madrid. Me encantaría que pudieran darme servicio aquí o, en caso contrario, recomendarme profesionales. Ya he hablado con algunos vendedores de cte y cosas similares y no me han terminado de convencer (mejor no mencionarlas técnicas de venta de algunos de ellos, que pretenden que les firmes un contrato en el momento con la promesa de una oferta que finaliza). Muchas gracias por adelantado.
Buenos días Ángeles,
A día de hoy en Hume Ingeniería únicamente contamos con sede en Galicia. En el siguiente enlace podrá consultar el alcance del servicio de diagnóstico de humedades fuera de Galicia por si pudiera resultar de su interés.
Atentamente,
El equipo de Hume Ingeniería.
Buenos días
Para comenzar, quiero felicitarles por sus explicaciones, facilitan en gordo la comprensión sobre el problema de la humedad de condensación.
Tengo una vivienda en zona rural muy húmeda en la zona atlántica de Navarra, y además es un molino antiguo. Tengo niveles de humedad altos (en torno a 70%) y son de condensación (también hay un poco de capilaridad en la parte baja de los muros de la planta baja. Ha estado una empresa de humedades y me han ofrecido instalar dos unidades de STA (la denominan PureSilent). Yo les he hablado de la posibilidad de instalación de un sistema de renovación mecánica de aire centralizada pero me dicen que en las viviendas usadas no es efectivo, tanto por las obras a realizar, como por los niveles más bajos de estanqueidad y que por eso en rehabilitaciones de viviendas no se usa… pueden decirme si esta observación es real?
Buenos días Ane,
En nuestra opinión profesional, estamos en total desacuerdo con esta afirmación.
Las instalaciones de renovación de aire centralizada también se están instalando en viviendas ya existentes y con plenas garantías de evitar condensación, en realidad aportan incluso mejores prestaciones energéticas que la sobrepresión. Tal y como se enuncia en este artículo, los inconvenientes serán la obra y, dependiendo de la alternativa, el coste inicial de inversión (en su caso, al haberle presupuestado dos unidades de STA, tal vez ni eso). El resto, en nuestra opinión, son todo ventajas: eficacia de renovación de aire, nivel sonoro, amortización de la inversión asociada y coste mensual… En cualquier caso, insistimos en la necesidad de particularizar el diseño, cada problema de condensación suele tener sus propios condicionantes y serán la clave a la hora de prescribir una u otra actuación.
A expensas de una opinión mejor fundada, discrepamos profundamente con la observación que cuestiona su efectividad.
Atentamente,
El equipo de Hume Ingeniería.
Hola buenos dias Hume,un articulo bien explicado y donde se pone en entredicho tanto la viavilidad de esos de sistemas como las empresas que los promocionan,en mi caso(estoy ahora inmerso en él y he tenido el gusto de poder hablar con vosotros)es un problema de humedades,condensacion y moho,todo debido a la gran estanqueidad que tengo en mi casa(cerramientos nuevos en puertas y ventanas sin ninguna rejilla en casa y como remate decidimos en reunion con los vecinos poner hace 2 años una cubierta de hormigon en la fachada exterior del bloque),despues de 2 inviernos viendo el problema hemos decidido solucionarlo llamando a varias empresas de humedades,las cuales nos ofrecian su propia maquinita,la cual es de su fabricacion y a ellos tienes que reclamar en cuanto surja cualquier problema,cambio de filtros y demas y 1 resistencia funcionando las 24 horas del dia,con el sobreprecio en la factura de la luz…con precios entre 4000 y 5000 euros…
Hoy por hoy tenemos claro despues de informarnos bien que no vamos a comprar ninguna maquina de esas,vamos a poner un sistema de ventilacion de doble flujo con recuperador de calor,que tienen mas o menos ese precio y aparte de quitarme el problema de las humedades cumple con el CTE ,en un principio ibamos a ponerlo centralizado con sus conductos,rejillas y demas pero ahora mismo estamos valorando la opcion del sistema descentralizado(1 solo agujero en la pared de la estancia donde quieras poner el sistema!),y aunque no es tan efectivo es bastante menos costoso(mas del 70% mas barato) y no tengo que desmontar media casa,problema que tenemos en una casa habitada…
Conclusion:hay que informarse bien antes de cerrar una venta con un comercial,suele ser una venta bastante agresiva y la quieren cerrar el mismo dia que van a tu casa(mas de 3 horas han llegado a estar con nosotros para cerrar el contrato)bien contandote que es la unica opcion,con descuentos del 10 o el 15%,o con otro tipo de historias…que soluciones como yo mismo estoy viendo las hay y no tienen porque engañarnos.
Perdon por la parrafada y por si alguien a podido sentirse ofendido,pero es mi sentir despues de informarme bien de todas y cada una de las soluciones posibles a mi problema.
Hola. He encontrado este interesante hilo buscando información sobre los sistemas de renovación con intercambio de calor descentralizados y me gustaría saber, si ya lo ha instalado, qué opinión tiene sobre los mismos. Muchas gracias.
He estado leyendo estos comentarios y sus respuestas y me interesa bastante porque también tengo un problema de humedad por condensación en una casa muy antigua y he sufrido el ataque de estas empresas de tratamiento del aire. Me gustaría saber un poco más del sistema de ventilación de doble flujo con recuperador de calor del que habla Julián, efectividad y diferencia entre ponerlo centralizado o no. Gracias.
Buenos días Isabel,
Las diferencias son muchas y distintas en función del problema de cada vivienda. A título resumido, diríamos:
– El centralizado presta servicio a toda la vivienda, por eso requiere conductos de ventilación y más obra.
– El descentralizado únicamente presta servicio a la estancia en que está instalado, por eso no requiere conducciones y la obra se limita (casi) a encastrarlo en una pared exterior.
– En cuanto a precio, con carácter general la instalación de una o dos unidades descentralizadas puede resultar más económica, pero en el momento en que son ya tres o más las estancias afectadas, la suma de tantas descentralizadas suele sobrepasar el precio de la instalación conjunta.
En todo caso y como siempre decimos, vale la pena particularizar para cada caso concreto lo que ahora son pautas generalizadas, ya que podrían no resultar de aplicación en según qué caso.
Atentamente,
El equipo de Hume Ingeniería.
Hola Julián,perdona yo tengo una casa con problemas de humedad por condensación y moho asu vez,entonces que me recomiendas que sistema es el mejor.
Buenos días, tengo un problema de humedades por condensación en Madrid, vivienda de unos 60m2, y distribución rectangular. He recibido ofertas para la instalación de estas máquinas que trabajan por sobrepresión, y después de buscar información y sobre todo de leer sus interesantes artículos, no tengo más que dudas, pues al final se aplican soluciones generales para resolver problemas particulares y muy variados. La información técnica de la máquina a priori cubre las necesidades de caudal para cada estancia de la casa, pero no me convence que me instalen rejillas de expulsión en las habitaciones con salida a la propia cámara de aire(el aparato va en el salón), pues el HS3 del CTE indica que estas rejillas de expulsión deben instalarse en los locales húmedos(cocina y baño). A parte de esto, el consumo eléctrico, ruidos, posibles olores…Por lo que he leido, no son vds. muy partidarios de estas soluciones, pero ¿me pueden aportar su punto de vista para este caso?
Gracias
Buenos días José,
A la vista de su descripción y, tal y como se expone en el artículo, es posible que la sobrepresión combata la condensación de su vivienda (60 m2 y distribución rectangular), más allá de posibles inconvenientes como consumo, ruido, etc. La alternativa pasaría por diseñar un sistema de ventilación que satisfaga las prescripciones que fija el CTE (Código Técnico de la Edificación), en su Documento Básico de Salubridad, capítulo HS3 Calidad del Aire Interior e, idealmente, acompañando un intercambio térmico en los aires de entrada y salida.
En todo caso, nuestro mejor consejo sería que intente contactar con algún profesional de su localidad (arquitecto, aparejador o similar), que tenga ocasión de evaluar en primera persona la vivienda y diagnosticar causas y soluciones.
Atentamente,
El equipo de Hume Ingeniería.
Muchas gracias por su interés y amable respuesta. Intentaré seguir su consejo para tomar una decisión lo más informada posible.
Un saludo