Las fachadas son las principales responsables de dos tipos de humedades que pueden afectar a nuestras viviendas: las filtraciones y las condensaciones. Una fachada en malas condiciones, con impermeabilización y aislamiento defectuosos o, todavía peor, inexistentes, puede acarrear infinitos problemas de humedades al interior de una casa.
En los últimos años se han venido popularizando dos técnicas constructivas para los acabados de las fachadas que cada vez suman más adeptos: las fachadas ventiladas y las SATE (Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior). Pero, ¿son efectivas contra la humedad?
En nuestro artículo de hoy vamos a hablar de la relación entre fachadas SATE y humedades. ¿Se llevan tan bien como parece o hay conflictos ocultos?
Índice de contenidos
¿Qué es el SATE?
Los sistemas SATE (Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior) consisten en colocar un aislamiento térmico en la cara exterior de los muros de una vivienda.
Las fachadas SATE están concebidas para:
- Mejorar la eficiencia energética y la habitabilidad de una vivienda unifamiliar o plurifamiliar.
- Evitar filtraciones y condensaciones.
- Mejorar el aislamiento térmico y acústico.
Fachadas SATE y humedad por filtración
Al igual que las fachadas ventiladas, el SATE es un sistema que consta de varias capas superpuestas que se puede aplicar tanto en obra nueva como en rehabilitaciones y que va a incrementar considerablemente el valor de la vivienda.
Por norma general, se aplica un revestimiento impermeable en la capa más exterior para prolongar su durabilidad y evitar que filtre agua al interior en los días de lluvia y temporal.
En este sentido, podemos decir que, efectivamente, las fachadas SATE evitan las humedades por filtración.
Fachadas SATE y humedad por condensación
Otra historia son las condensaciones, y el tipo de condensaciones ante el que nos encontremos…
Tradicionalmente, las viviendas se aislaban construyendo una cámara de aire entre la fachada y la pared, que podía llevar material aislante o no. No obstante, el inconveniente principal de esta cámara es que podría no evitar los puentes térmicos y, por consiguiente, es muy habitual que se creen condensaciones en esos puntos fríos.
Con la técnica del SATE, el aislamiento va en la parte exterior de la fachada, y cubre toda la superficie. Como consecuencia, evita los puentes térmicos y las condensaciones originadas por este fenómeno.
No obstante, antes de decantarte por una fachada SATE para evitar la humedad por condensación, debes investigar muy bien cuál es el origen de esa condensación, ya que si la causa es una elevada humedad interior, el SATE puede ser contraproducente.
Y recuerda…
No nos cansamos de repetirlo: cada humedad tiene un origen diferente y la solución varía de un caso a otro.
Si quieres ponerle solución de forma eficaz y definitiva, déjate aconsejar por especialistas.







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